Querido Jesús,
Que pregunta,
¡Tan penetrante, tan atractivo!
Porque necesito contestarlo de corazón
Desde mi experiencia, mi experiencia contigo.
No haces esta pregunta para probar mi inteligencia,
O por poner a prueba mis conocimientos adquiridos,
¡O saber si todavía recuerdo mi catecismo!
¡No! Haces la pregunta para saber dónde te encuentras en toda mi vida;
Para saber si te tomo en serio;
Saber si mi experiencia contigo significa algo para mí;
Si me doy cuenta de que eres el centro de mi vida.
Me haces esta pregunta para llevarme a la profundidad
¡A mi corazón, donde quieras vivir y darme la vida!
No es una cuestión intelectual;
Es una pregunta experiencial.
Mi amado Jesús,
Tú eres mi Amor, mi Ancla, mi Roca, mi Salvación.
Tienes mi vida, como Hijo de Dios, firmemente en Tus manos.
La lluvia puede caer, la tierra puede temblar, los problemas pueden rodearme,
Pero lo sé, y lo sé de corazón a través de la fe,
Que estoy a salvo en tus manos,
¡Porque Tú eres mi Salvador, mi Mesías!
Sobre todo esto, mi Amado Jesús,
Eres mi amor,
Porque en ti sé que toda la vida es amar:
Es el amor lo que mantiene todo unido.
El Padre creó todo con amor,
Y nos salvas por amor;
Un amor que no retiene nada, pero ama temerariamente,
Y se derrama por los demás.
Sí, querido Jesús,
¡Eres mi Maestro!
Porque me enseñas el camino a la vida verdadera,
El camino del Amor, el Perdón, la Comprensión;
Es el camino de la Alegría, la Paz y la Gratitud;
Es el camino que no tiene lugar para el egoísmo,
No hay lugar para la codicia
No hay lugar para la competencia
No hay lugar para la dominación
No hay lugar para la amargura.
Tu camino es Amor, Amor desinteresado,
¡Amor que ama todo el tiempo y en todas las situaciones!
Porque tú nos salvas por amor
Y enséñanos que solo el amor puede salvar, porque Dios es amor; ¡El amor eres tu!
Entonces, ¿quién eres tú para mí, Jesús?
¡Eres mi Todo, mi TODO!
Eres dueño de mi corazón,
Y yo te pertenezco, ¡total y completamente!
Eres la Luz que brilla en mi camino,
La Luz que ilumina mis días
La Paz que saluda mi día
El Coraje que llena mi ser
¡La Alegría que energiza mi alma!
¡Eres mi TODO Jesús!
Porque eres Dios, el Autor de toda vida.
Ninguna vida tiene sentido fuera de ti
Ningún corazón encuentra la verdadera alegría sin ti.
Todo el contentamiento se encuentra en ti.
¡Tú eres mi Todo, mi Amado Jesús!
Gobierna mi corazón con tu amor
Entonces puedo pensar en tu pensamiento
Siente tu sentimiento
Actúa tus acciones
¡Y sé amor como eres el amor mismo!
Esto es lo que eres para mí, Jesús:
¡Mi Amor, mi Ancla, mi Maestro, mi TODO!
A ti sea toda alabanza, por siempre. Amén.